La voz es un instrumento maravilloso. Aquellos que poseen el privilegio de expresarse con el canto y tener una gran potencial, saben también lo importante que es cuidarla. Fascinante, delicada y única, nada mejor que apreciarla para mantenerla lo más sana posible.
Por este motivo, y por muy sabido que se crea, se deben seguir siempre consejos para mantener nuestra voz “healty”, y así sacar el máximo provecho de este apreciado tesoro.
1. Buena hidratación:
Mantenernos hidratado es muy bueno para la voz. Beber, al menos, un litro y medio al día es importante para que nuestras cuerdas vocales estén en buena forma.
2. Respiración:
Si sentimos que nuestros pliegues vocales siempre se secan, también es útil para respirar los humos durante 10-15 minutos.
3. Evitar sustancias nocivas: alcohol, cigarrillos y comida basura
La mejor manera de esquivar el reflujo ácido tiene que ver mucho con los que tomamos. Por eso, es muy aconsejable no beber alcohol, no fumar y evitar la comida basura. En líneas generales es la mejor forma de cuidarse, llevar unos hábitos de vida saludable. Eso no quiere decir que en alguna ocasión se pueda hacer una excepción. Beber y comer de forma inadecuada podría ser perjudicial para nuestra voz porque aumentan el reflujo ácido y el resultado es una difícil recuperación para nuestros pliegues vocales.
El reflujo ácido es causado por comida específica como los fritos, el chocolate en exceso y la comida dulce en general. También por el alcohol, la grasa y los y los refrescos. Los cigarrillos también pueden influir en nuestra voz porque cuando fumamos nuestros pliegues vocales se secan.
4. Olvidarnos de situaciones de estrés:
Dejar aparcadas las preocupaciones, evitar situaciones estresantes y buscan nuestro equilibrio emocional. Estas pautas repercutirán de forma positiva en nuestra voz y su capacidad.
El estress puede influir en nuestra voz. Nuestro cuerpo reacciona a esta situación, así como nuestros pliegues vocales. Cuando estamos estresados o enojados a veces gritamos y forzamos la voz. Unn buen equilibrio en todo nuestro cuerpo es siempre el mejor arma para que no sufran nuestros pliegues vocales.
5. Practicar algún tipo de actividad o deporte.
6. Descansar bien.
7. Realizar prácticas vocales todos los días.
8. Calentar.
Siempre calienta tu voz antes de cualquier sesión de vocalización o de rendimiento. Cómo un atleta lo hace antes de un gran juego, debes calentar antes de usar tus cuerdas vocales. Muchas lesiones son causadas porque los cantantes no se toman el tiempo suficiente para calentar. No provoques tensión en tus cuerdas vocales intentando llegar a esas notas altas sin un buen ejercicio de calentamiento.